Escribir un poco.

Estoy tan cansado de correr para todos lados y de no tener tiempo para dejarme llevar por el viento incansable de mi imaginación, estoy cansado de pensar en la misma mina desde hace meses, y no poder olvidar y avanzar como siempre lo hago, estoy cansado del temor que le tengo a la almohada, pues se que dejarme tentar por el sueño significa despertar mañana, y empezar de nuevo, todo de nuevo, estoy tan cansado de sentirme sin fuerzas y sentirme sin ganas… sentirme viejo y luego mirarme al espejo, y ver que no lo estoy, y que debería tener ganas, tener fuerza… y que me haría bien dormir un poco, sin embargo, aquí estoy… con sueño y con los ojos rojos, la cabeza gacha y la mirada en suelo, despierto, sin ganas y cansado. Esto me hace bien, escribir un poco, retomar viejos proyectos, decir lo mal que me siento y arrepentirme al darme cuenta que la vida me ha tratado con gentileza, luego ver que esos proyectos están muertos, y que no importa que escriba pues no hay nadie que lea, y que todo esto no es mas que una perdida de tiempo, y aun así, el solo hecho de verme aquí, envuelto en palabras que no puedo ordenar bien me llena de extrañas y casi olvidadas sensaciones, me recuerda que escribir, por el solo hecho de hacerlo produce en mi un efecto sedante, que me aleja de la bulla de la televisión, y de los fantasmas en mi cabeza, me hace olvidar lo cansado que estoy y lo viejo que me siento, y me hace soñar en aquellos olvidados tiempos en que la relación con mi almohada era mejor, y finalmente, esta droga hace nacer una sonrisa en mi rostro, una sonrisa que hoy llevare a la cama, y con la que despertare en la mañana, que se ira desvaneciendo a medida que avanzan las horas del día, y que se perderá y olvidare completamente hasta la próxima ves que tenga el tiempo para tomar un lápiz y escribir lo mal que ha sido mi día. (Hace sueño... mi-no-editar-o-corregir)