04 mayo, 2005
teorias extrañas
Hay quienes aseguran que es el amor en si mismo lo que nos mueve, esa extraña sensación de mariposas en el estomago, eso que nos hace medir hasta el ultima palabra, esa sensación de incertidumbre que nos mantiene despiertos toda la noche, en ensoñaciones, preguntándonos ¿Qué pasaría si…? ese eterno placebo que nos llena y nos deja vacíos a la ves, ese cruce de miradas tan lleno de significado, y sin embargo tan simple, simple y delicado… ese amor que es el final, es el medio, la excusa y la razón de todas nuestros logros y caídas. Sin embargo con el tiempo, no he visto ejemplos de que sea ese amor el que mueve montañas, y hace que el mundo de vueltas, si no la falta de ese amor es lo que hace a la gente lograr las grandes hazañas, es el vació en si mismo, y la necesidad de llenarlo el que nos lleva a cometer locuras, el que nos lleva a dudar de nosotros mismos y de los demás, es ese vació que necesita ser llenado de placebos, y el temor a que jamás habrá suficiente con que colmarlo, es esa la verdadera sensación de duda, que te obliga a ser creativo, que te obliga a pasar noches en vela en busca de respuesta, tratando de leer entre señales confusas, tratando de amar, y ser amado en retorno… es la infelicidad, o la anticipación de esta por la ausencia de amor lo que logra llevar a la gente a sus limites… es este increíble temor a la ausencia de amor lo que mueve el mundo… lo que al menos, me mantiene en pie.
(creado en un extraño momento... no pregunten)
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1 comentario:
Que interesante, me gusto mucho!
Tienes mucha razón al decirlo, no es el amor, es la falta de el que nos hace mover montañas, o la ausencia de algo necesario para vivir.
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